Deberes y Ministerios en la Misa



La celebración de la Eucaristía es acción de Cristo y de la Iglesia, es decir, del pueblo santo unido y ordenado bajo el Obispo. Por tanto, pertenece a todo el Cuerpo de la Iglesia, lo manifiesta y tiene su efecto sobre él. De hecho, afecta también de manera diferente a cada uno de los miembros de la Iglesia, según sus diferentes órdenes, funciones y participación efectiva. De este modo, el pueblo cristiano, "linaje elegido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido", expresa la quesión y su ordenamiento jerárquico. Por tanto, todos, ya sean ministros ordenados o fieles laicos, en el cumplimiento de su función o de su deber, deben realizar única pero totalmente lo que les corresponde. (GIRM 91.)

Contacto